El juego de las letramáticas
Crea un juego en tiempos de coronavirus
Trabajo en un centro pequeño, minúsculo diría. Un centro que no tiene ni educación infantil ni secundaria. Eso no implica que estemos muy a gusto. Echo de menos tener a las profes y a los profes de infantil y, creo, ganaríamos mucho si también tuviésemos a secundaria y bachillerato en el mismo centro, generando una única linea educativa.
Me gusta lo que hago, aunque tenga que remar a contracorriente tanto metodológica como tecnológicamente desde hace mucho tiempo. Encontrar personas que quieran arriesgarse a ir en el mismo camino y andar ese camino con ellos, demasiadas veces sin acompañamiento público. Es lo malo de estar en un entro educativo púbico, dependes de las decisiones publicitarias (digo políticas) y de la falta de referentes de calidad en las instituciones y personas en la toma de decisiones.
Y aún así, trabajo en lo que me gusta. En buena parte porque estamos en plena construcción de lo que, creo, debe ser un centro educativo de futuro. Y en muy buena parte porque he conseguido un ecosistema, débil, con sus inestabilidades y sus problemas, pero un ecosistema de trabajo en torno a lo que (de nuevo, creo) que debemos trabajar en el centro educativo.
Y en mucha mayor parte gracias a pequeñas personitas que van creciendo cada día y que en muchas ocasiones te demuestran lo lejos que ya están llegando.
Hoy os hablaré de una de esas personas, una niña con una capacidad de trabajo, una motivación y una creatividad que ya me gustaría a mi tener con su edad, y con el doble de su edad. Bueno, vale, con el triple también.
Noa, que es como se llama la miña, se inventó hace meses un juego que mezclaba las matemáticas con las letras, una suerte de operaciones combinadas que pueden trasladarse a la operación que quieras, y desde ese planteamiento poder usarlo en el pretexto que quieras.
Me gustó mucho el juego en su momento aunque fallábamos en cómo explicarlo. Así que, en medio de este temporal de confinamientos y reclusiones varias, decidimos trabajar juntos para crear una presentación que lo explique lo mejor posible. Y testarlo y volver a mejorarlo, y testarlo de nuevo… ¿os suena?
Pues sí, un simple ejemplo de cómo usar Design thinking para crear un juego y para explicarlo.
No os voy a explicar el juego, aquí mismo será el testeo final, a ver si hay quien lo entienda y quien necesite mayores explicaciones. Eso nos permitirá mejorar nuestra explicación para el juego de Noa, que hemos bautizado “el juego de las letramáticas”
Lo tenéis como película, para visualizarlo de forma más simple y amena, y debajo en formato Keynote con cada uno de sus pasos. Me siento muy orgulloso de esta pequeña, de su empeño y personalidad, pero sobre todo de su humildad. Algo que nunca deberíamos perder.
Esperamos que os guste el juego y la explicación, mientras tanto podéis visitar el blog de aula de los “Tigres y Gallifantes”
Y no olvidéis que el último juego saldrá al inicio del curso siguiente, podéis ganar algunos premios, desde un Gallifante en impresión 3D pintado de forma personalizada hasta algún regalillo más (si conseguimos liar a algún comerciante de la zona).
Comments: 2
Increíble la evolución de esta idea, se ve que sois una pareja eficiente, ji, ji….
Me encanta que no tengas pelos en la lengua al expresar algunos de los problemas de la enseñanza pública o de aquellos que intentáis cambiar este sistema educativo, que falta hace.
Te agradezco las palabras que le dedicas a Noa, en especial me llena de orgullo que veas su humildad, ya que creo que es uno de los mejores valores que puede tener una persona.
Espero que guste tanto el juego de las letramáticas como la ilusión que los dos habéis puesto.
Gracias por tu apoyo incondicional hacia Noa y por despertar nuestras ganas de aprender al lado de nuestros hijos.
Gracias Mari. Sé que está gustando porque se lo he pasado a colegas míos de diferentes colegios de España, les gustaba y lo están compartiendo.