Somos unos tipos creativos

Somos unos tipos creativos

A estas alturas de la película ya está de más decir que todos somos creativos, todos nacemos con esa cualidad aunque muy pocos han sido capaces de luchar contra el sistema para hacerse un hueco con su creatividad en pleno desarrollo. Tristemente, muchas más personas consideran que no son en aboluto creativas, posiblemente porque o bien siempre se ha ligado la creatividad con algo plástico y consideraban que no daban la talla o bien porque desconocen otros tipos de perfil creativo.

Pero, ¿qué tipo e persona creativa eres en la escuela? ¿En qué áreas destacas más?

Tal y como yo lo veo, dentro de ese mundo de la creatividad y la educación, podemos diferenciar varios tipos de personas, algo muy interesante para poder potenciar aquellas facetas en las que más destacamos. No todos somos capaces de dibujar, hablar, recordar o escribir de la misma manera, algo que intrínsecamente se liga a la creatividad. Ser creativo es ser muchas más cosas.

Nuestros talentos son varios y junto con nuestras vivencias y nuestros pensamientos se complementan entre si de un modo que nos hace únicos a cada uno de nosotros. Pero todos somos creativos, de una u otra forma. La creatividad se presenta de manera diferente en cada uno de nosotros.

La creatividad se presenta en muchas y varidas formas… potenciarla es el derecho de cada alumno y un deber del docente.

Por ejemplo están las persona que son capaces de visualizar en su mente una imagen y decirle a su cerebro que guíe su mano para hacerla muy similar a la imagen que tienen en mente. Las hay que son capaces de «sincronizar armoniosamente» los sonidos haciendo música, ver un busto en el interior de una simple roca o combinar de manera única diferentes sustancias creando nuevos sabores en la cocina… y muchísimas más formas.

Estos docentes con estas cualidades necesitan crear en su entorno: murales, música, pintar, decorar… Vamos a denominarlos docentes creativos sensoriales o «plásticos».

Otras personas, sin embargo, aunque no tienen altas competencias para dibujar, pintar, tocar un instrumento o cocinar, son capaces de solventar problemas de manera muy creativa. Sus capacidades van más en la sintonia de encontrar soluciones imaginativas a problemas que se le presentan:

¿Quién no ha conocido a un «profe manitas» que, con sus propios recursos y conocimientos, es capaz de solucionarte la wifi que siempre da problemas, conectar los cables de audio para tener varios micros conectados a la mesa de meclas y grabar con varias cámaras la función de teatro de fin de curso.

Son los docentes que prueban todo el hardware que aparece por doquier, el que se monta su propio robot desde la impresión 3D o aprende a programar por el placer de hacer las cosas él mismo. Los llamaremos docentes creativos ingeniosos o «geeks».

El tercer grupo docentes creativos se centran en proyectos. Son visionarios que, aunque pueden carecer de la formación para generar por si mismos la solución, tienen la visión, la imaginación y el conocimiento de las piezas y personas necesarias y, sobre todo, como comibinarlas para llegar al punto final.

Esos docentes que generan contenido para complementar el libro de texto en las aulas, diseñar proyectos de aula en el que tiene muy claros los objetivos, el método, la organización,  busca aquellas actividaes en la red que generan valor añadido y las incorpora a su mochila…

Serán nuestros docentes creativos combinatorios o «arquitectos».

Y, finalmente, el último grupo. Los docentes que luchan contra el sistema porque tienen muy claro que existen otras aproximaxiones más potentes, más significativas y con mayor proyección para el aprendizaje del alumnado. Aquellos que reinventan los libros de texto para convertirlos en «otra cosa», los que modifican radicalmente la estructura del aula, del centro… los que mezclan edades, eliminan asignaturas o buscan nuevas maneras de saber si su alumnado es más capaz, se siente mejor con sus cpaacidade e intenta superarse y se valora positivamente a si mismo y a su entorno.

Creen en las aula fuera de las paredes y del horario y provocan en los demás una reacción máxima de aproximación o rechazo. Son ciertamente algo «antisistema» pero no por querer destrozarlo todo sino por querer crear algo conseiderablemente mejor.

Estos docentes crean, arriesgan y producen situaciones de aprendizaje radicalmente diferentes, se fijan otro tipo de metas y crean en el aula otros ambientes y situaciones de ampredizaje que consigue calar en el alumnado. Son nuestros docentes creativos de sistema o «hackers».

La creatividad forma parte de la alfabetización más básica y esencial a la que deben acceder todas las personas.

En un mismo centro eductivo existen multitud de formas de expresar nuestra creatividad. Fomentar las situaciones y otorgar espacios, recursos  y tiempo cada uno de los docentes y sus perfiles sólo redundará en crear un ambiente tremendamente inspirador. Entre todos ellos se puede generar dinámicas increíbles que sólo beneficiarían el poder crear un nuevo tipo de centro educativo de presente y de futuro.

Es obligación de los sistemas educativos, de las direcciones de centros educativos y de las administraciones el cuidar, mimar y potenciar a estos docentes porque son los que marcan la diferencia. Son los que crean otros ambientes en los centros, los que generan un cambio sistémico, los que dejan huella en el alumnado y los que pueden actuar como verdaderos mentores de los futuros profesionales, los que potencian su propia creatividad y la de los demás.

Y lo son porque viven en el aula, porque aman lo que hacen, porque conocen la actual realidad pero también saben como llegar a esa otra realidad, la escuela de futuro que queremos construir y además trabajan para ello.

Manel Rives
Manel Rives
Docente que trabaja con diferentes tecnologías, e intenta ayudar al alumnado a potenciar su creatividad y a realizar sus proyectos mediante tecnologías audiovisuales con nuevos dispositivos. Apple Professional Learning specialist & LinkedIn Learning Author

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