Rankingmanía: PISA y los delirios de la razón jerárquica
No deja de ser una paradoja que la investigación educativa y la pedagogía hayan avanzado tanto, al mismo tiempo en que el debate público sobre la educación se haya empobrecido de una manera tan elocuente. En efecto, durante los últimos 50 años, las ciencias sociales han puesto de relevancia la…
Es la primera pregunta que nos deberíamos hacer. Para qué narices sirve el PISA y para qué narices lo queremos…
Desde luego, para qué narices lo usan los políticos sí que lo sabemos… trasladar el foco de atención del problema, que debería ser educar, al de generar mano de obra y estratificar a la población que, unido al criterio de elitismo y recorte en gasto promovido por Wert y su jauría de neoliberales, da lugar a verdaderas barbaridades como la LOMCE y la privatización de la educación.
Y esto nos pasa porque el PISA, como otros estudios son un elemento político utilizado por aquellos a los que no les interesa la letra pequeña, sólo el titular de la prensa y su puesto en el ranking… y de paso colgarse alguna medalla.