Enseña desde casa
desde casa Aprende
Son momentos duros, para todos. Las familias han cambiado radicalmente la forma de comportarse y eso nos ha llevado a otros muchos cambios. Por supuesto, también al trabajo.
En la docencia, como en otras muchas profesiones, hemos intentado cambiar al mismo tiempo para mantener el día a día con la mayor normalidad posible, lo cual es un proceso en sí mismo.
Pasar de un modelo presencial, en el que la mayoría todavía se encuentra el 100% del tiempo, a otro no presencial sin los conocimientos esenciales sobre las barreras o limitaciones que existen y, al mismo tiempo, intentando aprovechar las enormes oportunidades que se abren, es muy complicado; y más en muy poco tiempo.
Estos días hemos presenciado cómo los maestros y profesores han buscado recursos, plataformas, modos de trabajo, ideas… para poder imbuirse en ellas en tiempo récord y hacer partícipes a su alumnado.
Corremos un peligro serio de sobredimensionar el trabajo de los pequeños. De trasladar el foco de lo importante y de saturar a nuestro alumnado con excesos de recursos, de materiales y, sobre todo, de tareas. Porque ya no son deberes, son mucho más y exigen un cambio de rutinas que en muchas ocasiones no es posible.
En ese sentido, resulta más interesante que nunca que recordemos la taxonomía de Bloom, el psicólogo americano que, en los setenta, desarrolló con su equipo una taxonomía que intentaba explicar qué es aprender.
Muchos años más tarde, con la redefinición y adecuación a los tiempos actuales, se recreó una taxonomía revisada que tener en cuenta cuando queremos hablar de APRENDER, con mayúsculas; y que adoptó la famosa forma piramidal, que va desde los procesos de bajo nivel (en la base) a aquellos procesos cognitivos de alto nivel (en la cima).
Recordar, comprender, aplicar, analizar, evaluar, crear, estas son las premisas que debemos utilizar para crear unas experiencias de aprendizaje lo más positivas y significativas posibles.
Por ello, aportamos nuestro granito de arena y os proponemos una serie de cursos que pueden ser beneficiosos para la formación del docente, no solo porque sea necesario formarse continuamente, eso los docentes llevamos tiempo haciéndolo
La propuesta que hacemos en esta ocasión va más en la línea de proponer ideas para crear mejores experiencias con nuestro alumnado ausente físicamente, pero al que podemos acceder de forma remota, y las propuestas de aprendizaje que hacemos llegar a nuestro alunado.
Y no nos olvidemos de la parte tecnológica. En un momento en el que se cuestiona el papel relevante de la tecnología en el mundo educativo, se evidencia más que nunca la necesidad de tenerla y usarla de la forma más positiva posible.
Ya no es cuestión de tener tecnología, es tener la mejor propuesta tecnológica para el fin que perseguimos. Y es en situaciones como esta en las que podemos realizar una mejor curación de contenidos y herramientas, al mismo tiempo que podemos determinar qué queremos conseguir con ellas.
Para ayudaros en esta transición, hemos seleccionado estos cursos para construir esta líneaformativa que puede ayudar a conseguir, por un lado, plataformas e ideas tecnológicas que pueden muy bien servirnos en estos momentos y, por otro lado, mejorar nuestros conocimientos acerca de la redefinición de las metodologías que utilizamos y que, ahora más que nunca, serán muy útiles en nuestros nuevos quehaceres diarios en esta forma de vida que hemos tenido que adoptar.
Esperamos que esta selección de cursos os sirva para conocer y utilizar nuevas herramientas, y para afrontar de un modo distinto la labor docente que nos queda por delante en esta situación tan compleja.
Y sobre todo cuidaos mucho y cuidad a los vuestros.