Desde hace un tiempo existe una corriente en educación, que algunos asumimos y que incluso es la base teórica para el tiempo que una persona, que ejercerá en el futuro como docente, ha de tener y es esa parte de prácticas.
Aparte de considerar las prácticas docentes -las de la carrera- como cortas y maniatadas en muchos casos, las que se realizan como segunda parte del concurso-oposición ya son de órdago, por no decir que inútiles. Y los que han pasado por ellas o habéis tenido a docentes a vuestro cargo lo sabéis.
Pero no es este tema el que quiero abordar, sino las prácticas más que necesarias a realizar por el profesorado que se quiere sumergir en un cambio metodológico profundo y por aquellos que quieren hacer un uso real y efectivo de la tecnología en el aula más allá del trabajo a la galería o del continuismo que persiguen las administraciones.
Ese tipo de trabajo, de cambio no se puede realizar solo, no puede ser llevado a cabo por personas que intentan cambiar dinámicas, procesos y pensamientos inculcados en decenas y decenas de años sin cambios reales en la práctica de aula. Es ahí donde debería surgir la figura del coach tecno-educativo, es ahí donde las personas que cuenten con recursos de conocimiento tanto en tecnología como pedagogía y con capacidades de transmisión deberían estar de referentes, como ya ocurre en algunos centros educativos aunque pocos.
MENTEP (MENtoring Technology-Enhanced Pedagogy) es una buena idea desarrollada por la Unión Europea a través del programa Erasmus+ en el que se intenta realizar un seguimiento online usando una plataforma y más de 1000 docentes que realizarán las funciones de pruebas para conocer si es posible una mentorización del docente hacia una pedagogía más avanzada y el uso efectivo de la tecnología dentro el aula.
çTegn todos cuestiones acerca de este proyecto. Por un lado creo que es una muy buena iniciativa pero sigo creyendo que la mentorización, el seguimiento, la tutorización precisa de un aliado competente dentro del aula, alguien que acompañe durante el proceso y no únicamente antes y después a través de formularios que recojan evidencias. No sólo es necesario saber qué elementos entran en juego, sino observar y acompañar al no iniciado incluso realizando conjuntamente las actividades con el alumnado.
Y en cuanto a los MOOCs de la European SchoolNet Academy a los que hace referencia el proyecto y habiendo sido un usuario muy descontento de dos de la misma institución, me da cierto recelo el acercamiento que puedan tener.
MENTEP es un primer paso, pero ciertamente creo que las administraciones tienen que dar un paso más, creando un MIR educativo que realmente busque tener a los mejores (y eso significa en muchos casos no hacer el seguidismo de la propuesta oficialista) en el que, durante un tiempo, los docentes de “vanguardia” (aunque habría mucho que matizar aquí, pero mucho mucho) acompañen, dirijan e incluso corrijan… y no hay nada malo en ello.