enseñar a pensar de forma crítica

El pensamiento crítico es una de esas cuestiones que todos consideramos tener, nos vemos a nosotros mismos como personas críticas, inteligentes y observadoras que saben ver las diferencias (incluso por encima de las premisas que los demás son incapaces de visualizar).

La verdad es que esta soft kill o habilidad transversal o de comportamiento que “parece” estar en la educación, y ciertamente está muy relegada, es una de las bases más importantes para construir los cimientos, ya que:

• nos ayuda a construir un aprendizaje profundo a partir de las preguntas pertinentes y la búsqueda de la respuesta

• Nos muestra un camino importante en la construcción de nuestra «mentalidad de crecimiento» 

• Desarrolla la actitud necesaria para ser un verdadero ciudadano libre

• Enlaza directamente con la creatividad por no dar por buena cualquier simple solución e intentar mostrar nuestra propia naturaleza en la construcción de productos

• Permite generar empatía si las preguntas adecuadas son formuladas no solo hacia el exterior, sino también hacia nuestro interior

• Trabaja la reflexión propia y colectiva al entender la crítica como un paso necesario en el desarrollo personal y de la sociedad 

En definitiva, es una baza esencial en la construcción de nuestra personalidad y conecta directamente tanto con la parte socio-emocional como con la cognitiva.

Establecer las estrategias del desarrollo de un pensamiento crítico no es sencillo en la actual situación en la que los contenidos dominan ele escenario, por mucho que digamos que lo hacemos al revés. No se trata de hacer un ”checklist» de si hemos generado un momento del preguntas, ni tampoco llega con usar algunas destrezas y rutinas de pensamiento. El pensamiento crítico es una estrategia a largo plazo en la que cada pazo puede verse afectado o verse reforzado por el anterior, por el entorno o por la estrategia. 

La cuestión es que necesitamos establecer algunas cuestiones muy importantes:

• más tiempos de calidad en el diálogo con el alumnado

• más estrategias entre pares iguales y pequeños grupos en las que no es necesario generar un producto final, el proceso de investigación es el producto más importante.

• un mayor conocimiento sobre la construcción de las preguntas acertadas para desarrollar un pensamiento crítico

• más variedad de posibilidades de acción con nuestro alumnado para poder entablar un diálogo constructivo, crítico y positivo. 

No es fácil, no. En cualquier caso, podríamos empezar con utilizar una serie de preguntas tan sencillas como las 2Q, las 2C y la 1D. No, no es una combinación de una caja fuerte ni “hundir la flota”.

Aunque podemos comenzar con cualquiera de las preguntas, no todas valen los mismo, no todas tienen el mismo rango de valor. Muchos expertos consideran que la primera premisa, la más importante, la que debe quedar absolutamente claro antes del siguiente paso es el porqué, lo que se conoce como

Cuando tenemos claro este elemento, podemos indagar encausas, momentos personas, procesos, etc. Pero en innovación así como en indagación, sin un por qué nos quedamos sin la parte esencial. Y esto sirve igualmente para cualquier elemento que nos propongamos en el centro:

• ¿Por qué vamos a cambiar la estructura de grupo?

• ¿Por qué vamos a introducir tecnología?

• ¿Por qué debemos tener un recreo de 20’?

• ¿Por qué usamos libros del texto?

• ¿Por qué…?

De todos modos, aquí tenéis una simple guía de las preguntas y el porqué del uso de las mismas en un proceso de aprendizaje. Sin olvidarnos (que muchas veces lo hacemos) que al final de todo esto debería haber un proceso de reflexión individual y colectivo. De no ser a´si, no existe una creación de pensamiento crítico real.